En la sociedad actual, los objetivos de la alimentación infantil se han ampliado y ya no se pretende conseguir un crecimiento óptimo y evitar la malnutrición y la aparición de enfermedades, sino también, a través de la misma, optimizar el desarrollo madurativo, instaurar hábitos saludables y prevenir la aparición de enfermedades de base nutricional, que son la causa principal de morbimortalidad (obesidad, hipertensión, diabetes, dislipidemia, síndrome metabólico, enfermedad cardiovascular y algunos tipos de cáncer). Las citadas enfermedades, que por primera vez comienzan a evidenciarse en la edad pediátrica, afectan inevitablemente a la calidad y expectativa de vida.
LA ALIMENTACIÓN DE LOS NIÑOS: Qué, Cómo,Cuándo
Los niños preescolares 3-5 años y escolares 6-12 años tienen necesidades alimentarias específicas, que para ser satisfechas de manera adecuada requieren de la participación de los encargados de su alimentación. De ahí que sea muy importante conocer cuáles son esas necesidades.
¿CÓMO DEBE SER LA ALIMENTACIÓN INFANTIL?
La alimentación de los niños, al igual que la de todo ser humano, debe responder de manera integral a sus necesidades biológicas, psicológicas y sociales.
La alimentación es:
- Un satisfactor biológico, pues provee los nutrimentos y la energía necesarios e interviene en el crecimiento y desarrollo máximo del potencial genético de los niños.
- Un satisfactor psicológico puesto que influyen en ella el agrado y el desagrado del niño por ciertos platillos; el estímulo que le representan la forma, color, olor, sabor, textura y temperatura de los alimentos y la seguridad con que puede ingerir o tomar trozos de comida de tamaño adecuado para él.
- Un satisfactor social, en la medida que en torno a ella se establecen una serie de relaciones y pautas de conductas; por ejemplo, el vínculo entre el niño y el encargado de su alimentación, los horarios de comidas, el comportamiento en la mesa y por supuesto, la transmisión de creencias, hábitos y costumbres.
Fuente: Lic. en Nutrición Natalia Berrones