Todos sabemos cómo es una llave, pero, ¿Cómo funciona?
El tipo de llave más utilizada tiene en su lateral unas montañitas llamadas dientes, que son la clave que le permite a la llave abrir su cerradura y sólo la suya. Por eso una llave sólo sirve para una puerta, y por ejemplo la llave de nuestra casa no abre la puerta de los vecinos, si no cualquiera podría entrar en nuestra casa. Gracias a nuestras amigas, las llaves, esto no es así.
Al meter la llave en la cerradura, las montañitas de su lateral empujan a unas barritas que hay dentro de la cerradura. En los sitios donde no hay montaña la barrita no se empuja, así que de todas las barritas que hay en la cerradura unas se empujan y otras no, dependiendo de qué llave hayamos metido.
Sólo si se empujan las barritas correctas y no se empujan las demás, la llave se puede girar para desplazar un pestillo que es el que desbloquea la puerta.
- Las llaves son un invento muy antiguo que se sigue utilizando hoy.
- Una llave sólo vale para abrir una puerta, en las demás no funciona.
- Los dientes de la llave empujan unas barritas que hay en la cerradura, así sabe la puerta si es o no la llave correcta.
- El objetivo de las llaves es que sólo quien tenga permiso puede entrar en un lugar.